La película de Michaell Moore, Sicko, me resultó interesante por su feroz crítica al sistema de salud estadounidense aunque la desmerece algunos excesos y parcialidades como el viaje a Guantánamo y a Cuba.
Es un hecho que dicho sistema evaluado por la OMS esta en el puesto 37 muy debajo de Francia, Nº1, Italia, 2da, Gran Bretaña o Canada como lo muestra en la película y lo corrobora una editorial del New York Times del 12 de agosto. El principal problema es que 45-50 millones de norteamericanos carecen de cobertura médica y que Nixon y el Congreso pusieron el sistema en manos de empresas de seguro de salud ( similares a nuestras prepagas) que con frecuencia niegan, con pretextos, el tratamiento cuando el costo es muy elevado y a veces lleva a la muerte anticipada del asegurado. Así lo denunció una médica ejecutiva de una de esas empresas ante el Congreso y lo documenta Moore. El legislador que impulsó la ley que firmó Nixon fué premiado con un cargo con un sueldo de 2.000.000 u$s anuales en la industria de la salud. Hillary Clinton en el primer gobierno de Clinton intentó rectificar el sistema pero la defensa de la industria fue tan fuerte que el proyecto se archivó.La mayoría de los países desarrollados tienen una cobertura universal e igualitaria de salud.En la evaluación de los sistemas de salud que publicó la OMS en el 2000 Cuba esta dos escalones más bajo que Estados Unidos en el puesto 39. Nosotros , la Argentina, en el Nº 75 mientras que Colombia, 22, y Costa Rica, 36, se destacan en América Latina. Sin embargo viendo las injusticias del sistema norteamericano que muestra el documental no parecería que estuvieramos tan mal, si uno tiene una obra social decente. Los parámetros de la evaluación son muy complejos pero en nuestro caso deben pesar el 40% de trabajo en negro y sin obra social, y los desocupados y marginados incluyendo los tobas que se mueren de hambre como nos muestran los medios. También los deficientes servicios de hospitales públicos y del PAMI con sus colas interminables, con las esperas de turnos para una operación que pueden demorarse meses deben contribuir a la baja calificación de nuestro sistema de salud. En Estados Unidos en campaña para las primarias de la elección presidencial del 2008 la salud es un tema de profundos debates. Aquí, a días de la elección presidencial, no hay debate. Hay que busca asegurar la equidad, la calidad y el acceso de todos los ciudadanos a la mejor atención posible sin costos extras como ocurre en Francia y otros países.
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